Este mes pasado, NVIDIA ha lanzado nuevas tarjetas de lo que antes era la gama Tesla y Quadro, es decir, profesionales, con precios muy ajustados y como son las A10, A30, A4000 y A5000, que complementan las ya existentes A100 y A6000.
Todas ellas con conectividad PCI-E 4.0, elemento clave ahora que tanto Intel ICELake, AMD Rome y AMD Milan, disponen de esta tecnología, el doble de rápida que el bus PCI-E 3.0.
Queremos hacer hincapié en especial en la tarjeta NVIDIA A30. Este producto es muy revolucionario en varios aspectos:
1º Después de que NVIDIA solo había dejado como tarjeta con la capacidad de hacer doble precisión la A100, sale esta tarjeta con más de la mitad en Tflops que su hermana mayor y con un precio bastante más bajo que la mitad.
2º Cumple el nuevo estándar NVIDIA MIG (Multi-Instance GPU) que permite virtualizar a nivel hardware este tarjeta, sin necesidad de recurrir a software adicional y con herramientas Open Source.
3º Su consumo de 165 W, lo hace de los más bajos del mercado. Ofrece 5,2 Tflops en doble precisión. Si la comparamos con la famosa K40, con un consumo de 235 W, que ofrecía un rendimiento de 1,43 Tflops, el avance ha sido espectacular. Incluso, si lo comparamos con la Tesla V100, que ofrecía 7 Tflops y un consumo de 250 W, que solo hace 2 años que se lanzó, la eficiencia energética es mucho mayor.
Por tanto, la nueva gama Tesla Ampere y en especial, la A30, se convierte en una solución muy flexible que permite (según los modelos):
A) Trocear la tarjeta para poder atender varios procesos en las colas de SLURM y en las máquinas virtuales con Open Stack, amortizando costes de compra y consumo (solo para los modelos A100 y A30 con el estándar MIG)
B) Agregar tarjetas, para afrontar soluciones de Deep Learning e Inteligencia Artificial, mediante conectividad NVLINK (disponible en los modelos A5000, A6000 y A40 en los modelos PCI-E 4.0 y A100 de 40 y 80 GB en los modelos SXM4)
C) Poder afrontar cálculos en doble precisión (solo modelos A100 y A30), simple precisión y Tensorflops, en todos los modelos.
Por tanto, con esta nueva gama, como nos tiene acostumbrados NVIDIA, de una generación a otra, hay mejoras en torno al 50% de rendimiento. Por supuesto, todas esta nuevas tarjetas, trabajan ya sobre Cuda 11.x y dispone de un ecosistema de software, cada vez más grande para poder aprovecharlas.
No queremos terminar este análisis, sin apuntar todo el software que ha lanzado NVIDIA, para virtualizar GPUs, tanto para entorno gráfico, como potencia de cálculo. Además, software como Parabricks, permite realizar sobre dos GPUs, cálculos de genética, que hasta ahora tardaban 1 semana, en una sola hora.
SIE es Preferred Partner de NVIDIA en la especialidad de Compute y visualization, además de que comercializa toda la gama de productos software de esta compañía, ofreciendo a sus clientes un servicio de asesoramiento de calidad, además de poder probar en remoto distintas tarjetas para ver el performance real con las aplicaciones del cliente.